Un poco de historia

Existe una tradición muy arraigada en los historiadores de identificar a Betanzos con el Brigantium Flavium del Itinerario de Antonino, mansión romana localizada en la vía XX, Per Loca Marítima.
La actual población de Betanzos se asentó en este lugar el año 1219, ocupando un altozano donde se levantaba el castro celta de Untia. Antes la población estaba situada en Tiobre, donde aún se conserva un lugar con el nombre de Betanzos Vello. Algún historiador afirma que en esta primitiva villa tuvo su corte el efímero rey de Galicia don García, desde 1065 a 1072. El traslado del lugar se hizo a petición de los mismos vecinos de Tiobre y por concesión del rey gallego Alfonso IX. El puerto de Betanzos tenía ya entonces gran importancia entre los gallegos.
	Esto produjo una serie de conflictos con el de A Coruña, como el pleito de la Sal, que Alfonso X resolvió en favor de ésta, o como el comercio de vinos, cereales y maderas, que obligó a Alfonso XI a presentarse personalmente para resolver la contienda, esta vez en favor del puerto betancero, y, finalmente Pedro I, que favoreció a A Coruña. De cualquier manera la importancia del comercio y la navegación a lo largo del siglo XIV era tal que como dice Carré Aldao, sus habitantes eran como los genoveses de España.